Voy a comenzar por lo que hemos hecho los martes. El primer día de esta asignatura (Psicología de la Educación) fue el martes 27 de enero de 2015; por lo menos el primer día para mi. Desde que David (el profesor) se presentó y se puso a hablar comencé a conectar con cosas que habíamos visto y aprendido el cuatrimestre pasado en Psicología del Desarrollo. No por el contenido, porque realmente no había dado tiempo aun a que hablásemos sobre el contenido. Más bien fue por la forma de plantear las preguntas, de hablar, de gesticular,...no sé que fue exactamente, pero algo me hizo conectar con ese recuerdo; y no fui la única que vio parecido entre los profesores de psicología del cuatrimestre pasado (Gloria y Alejandro) y David. Bueno, como iba comentando, en las sesiones de los martes hemos estado respondiendo tres cuestiones fundamentales:
- ¿Qué te sugiere la asignatura? (sobre qué va a tratar)
- ¿Qué expectativas tienes acerca de la asignatura?
- ¿Cómo vas a saber si se han cumplido o se están cumpliendo dichas expectativas?
Lo que hemos hecho en las sesiones de los martes ha sido básicamente comentar esas tres cuestiones. Cada uno ha respondido a las preguntas, y David ha ido apuntando ideas en la pizarra (lluvia de ideas).
Un punto a favor de esta asignatura, y una de las razones por las que más me gusta es porque podemos pensar, podemos reflexionar por nosotros mismos y de hecho debemos hacerlo si queremos que esta asignatura sea realmente significativa.
La sesión del jueves 29 de enero de 2015 me parece que fue clave, porque comenzamos con un tema que está siendo muy trascendente aun a día de hoy. David nos puso un vídeo:
https://www.youtube.com/watch?v=5MgBikgcWnY. Antes de que nosotros lo visemos nos advirtió de que todo lo que íbamos a ver y a escuchar era real. Quizás él pensó que no nos lo íbamos a creer y por eso nos advirtió antes de que nos lo tomásemos como una broma. En cualquier caso, realmente lo que se comenta en el vídeo parece un poco difícil de creer y nos hace replantearnos algunas cosas muy importantes. A mi por lo menos me hizo recapacitar acerca de la importancia de ser eficientes y aprovechar bien el tiempo, porque es una de las cosas que por mucho que ganemos o por mucho que nos esforcemos, si lo perdemos no lo podemos recuperar ni volver a ganar. Yo creo firmemente que el tiempo que perdemos no se puede recuperar de ninguna manera, por eso procuro aprovechar bien mi tiempo y valorarlo. Antes de seguir comentando lo que hicimos en las sesiones quiero dejar el tema aquí, planteando una última pregunta que creo que todos debemos tener en mente: ¿estoy usando el tiempo como realmente debo?, o más bien, ¿estoy usando el tiempo como realmente quiero?
Seguiré comentando lo sucedido en clase y reflexionando en breve.
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